Magnesio y vitamina D: efecto en el comportamiento en casos de TDAH

lunes 9-mayo-2022

El trastorno por déficit de atención con hiperactividad, también conocido por sus siglas TDAH, es un trastorno del desarrollo neurológico. El trastorno presenta tres características fundamentales, a saber: incapacidad de mantener la atención, hiperactividad e impulsividad [1]. El TDAH es una condición que puede afectar de forma importante tanto a quien la padece como a quienes forman parte de su entorno cercano.

 

Los resultados de varias investigaciones realizadas recientemente sugieren la posibilidad de que los nutrientes desempeñen un papel importante en el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Se ha prestado especial atención al magnesio y a la vitamina D, pues los déficits tanto de magnesio como de vitamina D parecen ser más frecuentes en niños con TDAH [2].

 

El estudio

Investigadores de Irán analizaron los posibles efectos de la administración de un suplemento con magnesio y vitamina D en los problemas de comportamiento de niños con TDAH mediante un estudio aleatorio en doble ciego controlado [3].

En la investigación participaron 66 niños. Antes de comenzar el estudio, se llevó a cabo una evaluación inicial del comportamiento de los niños mediante el uso del cuestionario de Conners para progenitores. A continuación se dividió a los niños en dos grupos de iguales dimensiones. A uno de los grupos se le administró durante ocho semanas un suplemento semanal de 50.000 UI de vitamina D y un suplemento diario de 6 mg de magnesio por kilogramo de peso corporal. Al otro grupo se le administró un placebo durante el mismo periodo de tiempo. Una vez transcurridas las ocho semanas, se volvió a evaluar el comportamiento de los niños con el mismo cuestionario.

 

Los resultados

Después de ocho semanas, los niveles séricos tanto de magnesio como de vitamina D del grupo al que se había administrado los suplementos habían aumentado de manera significativa en comparación con los del grupo al que se había administrado el placebo. Los resultados de los cuestionarios de los niños que habían recibido suplementos también diferían claramente de los obtenidos con anterioridad al comienzo de la investigación. Se observó una disminución significativa en los problemas de comportamiento, en los problemas sociales y en los problemas relacionados con la timidez y la ansiedad. En cambio, los problemas psicosomáticos relacionados con el TDAH no experimentaron cambios significativos con el uso de los suplementos.

Conocimiento a través de la práctica

En un artículo anterior [4] ya le informamos sobre el posible efecto positivo de la administración de suplementos a niños con TDAH. Piense por ejemplo en el zinc, el hierro, el sodio y las grasas del pescado. A esta lista podemos añadir ahora el magnesio y la vitamina D.

Esto significa que, si entre sus pacientes se incluye algún niño con problemas de comportamiento como resultado de su TDAH, es importante analizar cuidadosamente su estado nutricional. También puede ser útil llevar a cabo un análisis de sangre para determinar los niveles séricos de magnesio y vitamina D. Complementar ambos nutrientes (en primera instancia a través de la alimentación, por supuesto, y, potencialmente, mediante la administración de una dosis adecuada de un suplemento nutricional de buena calidad y fácil absorción) puede suponer una diferencia positiva importante en el comportamiento del niño.

 

Para leer más sobre las indicaciones, interacciones y administración de los suplementos nutricionales, consulte nuestras monografías