El tratamiento intestinal es bueno para el SII y la depresión

miércoles 26-abril-2017

Investigadores de la Universidad MacMaster (Canadá) han descubierto que los síntomas tanto físicos como psíquicos del síndrome de intestino irritable están causados por bacterias intestinales. Este avance es importante para la manera en que debes abordar en la consulta el síndrome, además de la depresión asociada.

 

Con anterioridad te informamos de que una buena intervención alimentaria puede reducir significativamente los síntomas de la depresión entre moderada y severa. Un nuevo estudio señala que la flora intestinal desempeña un importante papel en ella. Esta investigación establece una relación causal entre la calidad de la flora intestinal y los síntomas físicos y psíquicos del síndrome de intestino irritable (SII).

 

Flora intestinal, SII y depresión 

El SII es la patología más frecuente del tubo digestivo. Se calcula que entre el 5% y el 20% de la población holandesa lo padece. Sus síntomas son, entre otros, dolor abdominal y alteraciones de las deposiciones como diarrea y estreñimiento. Pero esta enfermedad no solo tiene consecuencias físicas: muchas veces también se presenta con sentimientos de ansiedad y depresión. Hay una nueva prueba de que existe una relación causal.

 

Los investigadores trasplantaron la flora intestinal de pacientes con SII, tanto con ansiedad como sin ella, a ratones sin gérmenes. Los ratones mostraron cambios que también se observan en los pacientes con SII en cuanto a función intestinal y comportamiento. Los aspectos del SII que se transmitieron mediante el trasplante fueron, entre otros, la velocidad del tránsito intestinal, el mal funcionamiento de la pared intestinal, las inflamaciones de bajo grado y la conducta ansiosa/depresiva.

 

Un grupo de control de ratones recibió un trasplante de participantes sanos. Estos ratones no mostraron ningún cambio en su función intestinal o comportamiento.

 

Qué puedes hacer tú en la consulta 

En palabras de los investigadores: "Esta investigación demuestra mucho más que una simple correlación. Ahora tenemos la prueba en nuestras manos de que las modificaciones en la flora intestinal influyen tanto en el intestino como en el comportamiento de los pacientes con SII".

 

Además de una buena intervención alimentaria, la terapia debe orientarse específicamente a la flora intestinal con prebióticos y probióticos, entre otras intervenciones, que sirven tanto para los problemas intestinales como para el comportamiento asociado a ellos.

 

También hay otras afecciones psíquicas en las que la flora intestinal tiene un papel. Lea nuestro libro blanco "La buena salud empieza en el intestino", donde sabrá cómo tratar eficazmente la flora intestinal en casos de TDAH y autismo, por ejemplo, y encontrará un plan progresivo claro.

 

Fuentes 

De Palma et al., Transplantation of fecal microbiota from patients with irritable bowel syndrome alters gut function and behavior in recipient mice, Science Translational Medicine 01 Mar 2017: Vol. 9. Issue 379.

https://www.mlds.nl/chronische-ziekten/pds-prikkelbare-darm-syndroom/