Se calcula que las deficiencias de magnesio se dan aproximadamente en el 75% de la población. Además, su consumo a través de la dieta ha descendido estructuralmente en las últimas décadas [1]. Se trata de una tendencia inquietante, sobre todo considerando nuestra acelerada sociedad: el magnesio tiene un papel importante en la salud mental, y en cantidad suficiente es capaz de hacer que tu cliente resista mejor el estrés.
El magnesio es necesario, entre otros, para procesos neurológicos como la neurotransmisión y la plasticidad de las neuronas. Estos procesos biológicos están en la base del aprendizaje, la memoria y la regulación del estado de ánimo. Diversos estudios demuestran que el déficit de magnesio está relacionado con la depresión, y en otros se ha descubierto que es una forma segura y barata de aliviar esta afección. Es algo que se ha demostrado ahora en un ensayo controlado aleatorizado doble ciego entre sesenta pacientes depresivos.
Durante ocho semanas se administró a diario 500 mg de óxido de magnesio o bien un placebo a pacientes con depresión y bajos niveles de magnesio en sangre. A la luz del Inventario de Depresión de Beck II que se realizó entre todos los participantes, se vio que el magnesio funcionaba significativamente mejor que el placebo a la hora de reducir la puntuación en la valoración de la depresión. También resultaron ser más altos los niveles de magnesio en sangre, por lo que se concluyó que existía una relación.
El óxido de magnesio no es soluble, por lo que apenas es absorbido por las células del organismo. Tiene efecto laxante, lo que puede conferirle incluso un efecto negativo sobre el estado de los minerales en el cuerpo. Por tanto, cabe esperar que el consumo de una forma de magnesio de mejor absorción proporcione beneficios para la salud aún mayores. Ejemplos de magnesio de buena absorción son las formas orgánicas bisglicinato de magnesio y citrato de magnesio.
Por lo demás, parece estar de moda no usar productos ortomoleculares profesionales para las investigaciones con suplementos [2]. Por desgracia, esto deja fuera del mapa gran parte de los potenciales efectos para la salud. No deja de ser una lástima que no haya esperanza de que las mejores formas de magnesio acaben llegando de esta manera al entorno cínico.