Movernos como nos movíamos antes

lunes 10-julio-2017


Si queremos saber con qué intensidad y frecuencia debemos hacer ejercicio, lo mejor que podemos hacer es mirar a nuestros ancestros. Los hallazgos fósiles nos dicen poco sobre cómo se movían, pero podemos aprender mucho de tribus tradicionales que perviven hoy en día, como los hadza.

 

Los hadza son una tribu tradicional que existe hoy en día en el centro del norte de Tanzania, en África. Cazan, pescan Synodontis contracta y recolectan tubérculos, bayas y frutas. Más parecido a la vida de nuestros ancestros, casi imposible. ¿Pero y cuál es el patrón de ejercicio de los hadza?

 

75 minutos al día

Lo que llama la atención de esta tribu es que hacen un ejercicio entre moderado e intenso durante una media de 75 minutos al día para ganarse el sustento. A modo de comparación: a muchas personas de Occidente les parece todo un reto llegar a los 150 minutos a la semana. Pero no es lo único llamativo de los hadza. En un estudio a largo plazo de la Universidad de Arizona (EE. UU.) se ha visto que tienen un riesgo muy bajo de sufrir enfermedades cardiovasculares.

 

"La hipertensión es extremadamente rara entre ellos", afirman los investigadores. "En los Estados Unidos, la mayor parte de la población mayor de sesenta años tiene hipertensión. En los hadza, solo se da en el 20-25%. Y en cuanto a los niveles de lípidos en sangre, prácticamente no hay indicios de que los hadza tengan ningún riesgo de padecer cardiovasculopatías".

 

Llevamos una vida cada vez más sedentaria

Quizá no todas las ventajas para la salud deban achacarse a la realización de más ejercicio. También la dieta y otros factores pueden tener su influencia. Pero es bueno reflexionar por un momento sobre el papel que el ejercicio físico ha desempeñado durante nuestra evolución y en qué situación nos encontramos hoy.

 

"En los últimos doscientos años nos hemos vuelto cada vez más sedentarios. El gran cambio parece haberse producido a mediados del siglo pasado, cuando empezamos a hacer más trabajos sentados".

 

Datos cuantitativos

Algo especial en el estudio entre los hadza es el hecho de que se han recopilado datos cuantitativos de la frecuencia cardiaca con un monitor móvil de ritmo cardiaco. También se les siguió mediante GPS a lo largo de grandes distancias, de modo que pudo medirse cuánto y a qué velocidad se desplazaban cada día.

 

De los datos se deduce, entre otras cosas, que los hadza mantienen el mismo nivel de actividad durante toda su vida. Así pues, no reducen su actividad física al envejecer, como sucede casi sin excepción en Occidente. ¿Pero qué dice el estudio acerca del patrón de ejercicio al que deberíamos aspirar hoy en día?

 

"Debemos preguntarnos qué clase de patrones de actividad han impulsado la evolución de nuestro sistema cardiovascular, neurobiológico y muscular. ¿La respuesta? Que no es razonable pensar que equivalen a caminar 30 minutos diarios en una cinta de correr. Hablamos más bien de 75 minutos o más al día", afirman los investigadores. Y eso tanto para los jóvenes como para la gente mayor.

 

Fuente

David A. Raichlen et al, Physical activity patterns and biomarkers of cardiovascular disease risk in hunter-gatherers, American Journal of Human Biology (2016).