Cinco consecuencias del déficit de vitamina B12

jueves 22-junio-2017

Muchos trastornos neurológicos, desde la depresión hasta la demencia, están relacionados con la vitamina B12. Pero también en la celiaquía se da con relativa frecuencia la carencia de B12.  Te resumimos en una lista las cinco patologías relacionadas con la B12 más importantes.

 

1 - Anemia perniciosa

 

Las personas con anemia perniciosa desarrollan a menudo una deficiencia de vitamina B12. Pueden pasar años antes de que aparezcan síntomas, pero cuando se agotan las reservas de B12, es necesario un tratamiento rápido con altas dosis. La mayoría de las veces, se realiza con inyecciones. No obstante, las dosis altas por vía oral parecen ser igual de efectivas, siempre y cuando la suplementación diaria sea de un mínimo de seiscientos microgramos.

 

2 - Celiaquía 

En la celiaquía (intolerancia al gluten) no tratada, la deficiencia de B12 se da con relativa frecuencia: según un estudio, incluso entre el 20% de los pacientes. Varios meses después de haber iniciado una dieta sin gluten hay recuperación, pero la vitamina B12 en inyecciones u oralmente en altas dosis puede anular más rápidamente las consecuencias de una carencia.

 

3 - Demencia  

En pacientes con alzhéimer, la cantidad de vitamina B12 en el líquido cefalorraquídeo es menor que en pacientes con otros tipos de demencia, mientras que los niveles en sangre de vitamina B12 no varían entre ambos grupos. También sabemos que un bajo nivel de B12 está asociado a la acumulación de homocisteína, la contracción del tejido cerebral y a una mayor probabilidad de padecer alzhéimer. Cada vez hay más evidencia de que la suplementación con vitamina B12 (acompañada o no de ácido fólico) puede retrasar la degradación de la memoria e incluso contrarrestarla en parte.

 

4 - Depresión 

Hay una relación clara entre la B12 y la depresión: y es que nada menos que el 30% de las personas con depresión severa sufren un déficit de esta vitamina. Además, la depresión severa se presenta con más frecuencia entre las personas con carencia de vitamina B12. La vitamina B12 y el ácido fólico son necesarios para la síntesis de la SAMe, que es esencial para la producción de neurotransmisores. La suplementación con vitamina B12 (en caso necesario, combinada con SAMe) mejora los síntomas depresivos.

 

5 - Enfermedades cardiovasculares  

Un alto nivel de homocisteína es un factor de riesgo claro y demostrado para la aparición de cardiovasculopatías. La B12 es, tras el ácido fólico, la vitamina más importante para ayudar a descomponer la homocisteína. También hay indicios de que la deficiencia de vitamina B12 causa altos niveles de homocisteína en personas mayores de 60 años. En este grupo, la suplementación con vitamina B12 hace bajar la homocisteína en sangre. Un estudio clínico entre 2155 personas mayores con 66 años de media que ya habían sufrido un ictus o un infarto demostró que la suplementación con vitamina B6, ácido fólico y B12 a altas dosis (respectivamente, 25 mg, 2500 μg y 400 μg) ofrece protección contra un segundo infarto o ictus y contra el fallecimiento. El riesgo de sufrirlo bajó un 21% gracias a la suplementación.

 

Lee también la monografía sobre vitamina B12 para encontrar referencias y más información científica sobre su aplicación, uso y posología.